9 mitos del coche eléctrico que desmontamos para conocerlo mejor
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Historias contadas en la barra del bar, artículos alarmistas en la prensa, extraños videos viralizados en las redes sociales… El coche eléctrico está rodeado de mitos y leyendas que hacen que parezca impensable que pueda ser una forma de transporte mayoritaria. Y, sin embargo, países como China o Noruega (por poner dos ejemplos muy diferentes)están apostando por él sin que ello les suponga ningún cataclismo.
Los temores y tópicos sobre el automóvil eléctrico han ido cayendo uno a uno antes las evidencias deuna tecnología que no para de mejorar a pasos agigantados. A continuación, vamos a desmontar algunos de esos mitos, y lo hacemos tomando como ejemplo elnuevo Opel Mokka-e. ElSUV 100% eléctrico de la firma alemanalo tiene todo para tumbar todos los tópicos.
“Los coches eléctricos no tienen suficiente autonomía”
Los más de 500 kilómetros de autonomía que pueden alcanzar algunas baterías eléctricas pueden parecer pocos frente a los 1.000 kilómetros de un vehículo de combustión sin repostar (algo que, en la práctica, no hace prácticamente nadie). Pero no nos costó pasar en pocos años de unos teléfonos móviles cuya batería nos duraba varios días a otros que apenas aguantaban hasta la noche.
Un vehículo eléctrico como elnuevo Opel Mokka-ecuenta con unaautonomía de 332 kilómetros(homologados en ciclo WLTP), que puede aumentarse si hacemos uso delmodo de conducción Ecoy de lafrenada regenerativa. Esta distancia es más que suficiente para nuestro día a día teniendo en cuenta que los españoles hacemosuna media de 50 kilómetros diarios. Es decir, incluso podríamos estaruna semana laboral entera sin necesidad de recargar.
“Se tarda mucho en recargar la batería de un coche eléctrico”
Debemos quitarnos la idea de la cabeza de que con un coche eléctrico nos pasaremos la vida dando vueltas esperando a que se cargue. Ya existen modelos comoel nuevo Mokka-e que carga al 80% en 30 minutos(en un punto de 100 kW), lo mismo que un smartphone de nueva generación. Y si vamos a hacer la compra o paramos a comer en una estación de servicio, tendremos más que suficiente para cargarlo al cien por cien.
Las baterías realmente han mejorado sus prestaciones, tanto en la autonomía como en los tiempos de recarga. Y lo harán más aún en los próximos años, pues son varios losproyectos y tecnologías que se están desarrollandoy que prometenuna experiencia muy similar(o mejor aún) que la que tenemos con el repostaje de los coches de combustión.
“No hay puntos de recarga suficientes”
Es cierto que la red de puntos de recarga en España es muy inferior a la de los países de nuestro entorno (poco más de 6.300 por los 12.600 de Francia). Pero podríandispararse hasta los 50.000 en los próximos añosgracias a la flexibilización de la normativa para su instalación yla entrada en el mercado de las grandes compañías energéticas.
En nuestro país ya es obligatoria la instalación en los garajes de viviendas de nueva construcción. Y para los que no tienen garaje propio, no tendrán que limitarse a “repostar” en la gasolinera, pues podrán recargar en parkings públicos, en la oficina, el supermercado…
La clave es sencilla:ya contamos con una enorme red de suministro de electricidad. Y con aplicaciones comoCharge My Car de Free2Movenos será muy fácil localizar el punto de carga más cercano.
“Los coches eléctricos no tienen apenas potencia”
Ha pasado mucho tiempo ya desde que los coches eléctricos eran aquellos cuadriciclos que no podían adelantar en carretera o subir una cuesta. Hoy en día podemos encontrarfurgones eléctricos capaces de transportar miles de kilos(como los nuevosVivaro-eyZafira-e), y superdeportivos eléctricos con velocidades de infarto.
Realmente, a día de hoy los vehículos eléctricos y de combustión están a la par en cuanto a potencia.El nuevo Mokka-e ofrece 136 CV de potencia, muy similar a la que ofrecen las antiguas versiones Mokka diesel y gasolina (136 CV y 140 CV respectivamente).Su par máximo de 260 Nmsí está muy por encima de los 200 Nm que ofrecía la antigua versión.
“Los coches eléctricos son muy caros”
Ya hemos explicado otras veces que, debido a las economías de escala, los vehículos eléctricos son más caros porque se venden menos unidades. Sin embargo, el crecimiento de las ventas están en constante aumento gracias entre otras cosas a losincentivos a la compra(comoel Plan MOVES IIal que podemos acogernos al comprar unMokka-ey beneficiarnos de hasta 5.500 euros en ayudas) y las normativas como el CAFE.
Gracias al aumento de la demanda y al abaratamiento de los costes, el precio medio de los vehículos eléctricosha descendido de 37.349 euros a 30.000 en apenas ocho años. ElMokka-epuede salirnos incluso más barato conlas ayudas de Opel.
“Es muy raro conducir un coche eléctrico”
No son pocos los que dicen que se les haría raro conducir un coche eléctrico, y que serían incapaces de acostumbrarse a cosas como las marchas automáticas. Y sin embargo, precisamente por carecer de embrague y caja de cambio,los eléctricos son más fáciles y sencillos de conducir. Tan solo debemos preocuparnos de acelerar, frenar y girar el volante, ya que, además, son divertidos de conducir, por el par motor, e idóneos para adelantamientos en ciudad.
Si además contamos con lossistemas de ayuda a la conducción (ADAS)que incluyen eléctricos de última generación, la experiencia es aún más relajante. ElMokka-eofrece Control de Crucero Adaptativo, Freno de Emergencia Autónomo, Sistema de Aparcamiento Automático… Una serie de prestaciones que hacen nuestro día a día más fácil.
“El coche eléctrico no puede cubrir mis necesidades”
Hace tiempo que los coches eléctricos dejaron de ser lo que conocemos un artículo ‘de nicho’, enfocado a un conductor joven que apenas hacía unos kilómetros por ciudad. Actualmente, podemos encontrarmodelos dirigidos a todo tipo de usuarios, desde familias a profesionales.
EnOpel, una marca que ha optado fuertemente por la electrificación en los últimos tiempos, aparte del mencionadoMokka-e, ideal para uso familiar, y de los futuros comercialesVivaro-e y Zafira-e, cuentan con elCorsa-e, la versión eléctrica del superventas de Opel y que se está ideado para un uso intensivo en la ciudad, y que ofrece el mismo espacio interior y prestaciones que su versión térmica.
“Un coche eléctrico es un lujo muy caro de mantener”
Un vehículo eléctrico es sin dudamás sofisticado y avanzado tecnológicamenteque un vehículo ordinario. Pero ello no quiere decir que requiera un mayor mantenimiento, o que sus componentes sean más caros de reponer.
Realmente un motor eléctrico es más sencillo en su configuración que uno de combustión, y por lo tanto es más fiable.No cuenta con elementos como caja de cambio o embrague, tan susceptibles de averías, yno necesita compuestos como el aceite de motor o los filtros de aire.
Además, si contamos con un Mokka-e, podemos un consumo de electricidad más eficiente. Gracias alservicio MyOpelpodemosprogramar la carga del coche y aprovechar las tarifas vallemás económicas de nuestro proveedor. Con todo, nuestro vehículo eléctriconos ahorrará a largo plazo mucho dinero.
“Los coches eléctricos no son seguros”
Mucho se ha hablado de casos de vehículos eléctricos que salían ardiendo la batería o los riesgos de electrocución de sus ocupantes. Pero si tenemos móviles sumergibles en agua, ¿un coche eléctrico se estropearía bajo la lluvia? De hecho en una inundación un coche eléctrico tienemás posibilidades de funcionar que uno de combustión, por una sencilla razón: no necesita aire para funcionar.
La verdad es que un vehículo eléctrico como el Opel Mokka-e es sometido arigurosas simulaciones de lluvia e inundaciones. Con ello se garantiza la estanqueidad de sus zonas eléctricas así como el riesgo de inflamabilidad de sus componentes.
Los vehículos eléctricos han ido superando las barreras que se les presuponía. Otras las tumbarán en los próximos años. Sin embargo, cuando dentro de diez o veinte años todos los coches sean eléctricos,nos seguiremos fijando en lo mismo de siempre.