Amazon, el imperio en el que nunca se pone el Sol

Javier Lacort

En el imaginario colectivo, decir “Amazon” evoca al comercio electrónico que ha cambiado las reglas y ha desbloqueado el logro más ansiado para cualquier empresa: convertirse en la metonimia de su sector. “El Amazon de…”, “el Netflix de…” o “el Uber de…” son algunos de los ejemplos de quienes lo han logrado.

En realidad,Amazon ha ido muchísimo más alláconstruyendo un ecosistema en forma de imperio, en el que no hay un año en el que no abra al menos una nueva línea de negocio. Una estrategia que le ha llevado a consolidarse en eltop 4 de empresas del mundo por capitalización bursátil, junto a Apple, Saudi Aramco y Microsoft. Tres tecnológicas, una petrolera. La venganza delnerd.

Competencia global

La llegada deLunapara plantar cara a gigantes de la industria del videojuego es la última declaración de intenciones de una empresa queestá ofreciendo un ecosistema cada vez más completo. Y además, lo está haciendo con un patrón: reducir al máximo la barrera de entrada para nuevos usuarios. Veamos algunos ejemplos:

Esta tendencia consolidada ha llevado a Amazon a serun competidor de prácticamente todas las empresas tecnológicas, en mayor o menor grado. Microsoft, Facebook, Google, Apple, Paypal, Dropbox, Spotify, Netflix, Disney, HBO, FedEx (lo de los envíos propios en Estados Unidosva en serio), Rakuten, Samsung, Storytel, Sonos, Nvidia, Alibaba, JD.com… En un simple gráfico (adaptado y actualizado de la publicación indiaFinshotspodemos ver cada una de las empresas y marcas propiedad de Amazon, y sus principales rivales en el mercado.

Este avance ha ido acompañado de una reinversión constante de los beneficios de la empresa, algo que le ha privado de presentar números negros durante una buena parte de su historia (ya no,ahora anda desatada), pero que al mismo tiempo ha maximizado el volumen de facturación año tras año y que ha servido para queBezos se corone como la persona más rica del mundo.

Si llegados a este punto alguien se pregunta qué será lo próximo en lo que nos sorprenda Amazon, la respuesta puede ir sobre ruedas.

Hogar

Servicios personales

Servicios corporativos

Ecommerce

Wearables

Transporte

El entorno del transporte es el único en el que Amazon todavía no ha presentado su gran apuesta, más allá de pequeñas utilidades comoEcho Auto, pensando para llevar a Alexa al coche. Hace unos meses anunció la compra deZoox, una startup que desarrolla(ba) coches autónomos.

En principio, la idea detrás de esta compra es crear una flota de ídems para abaratar sus costes de transporte de mercancías, pero nada impide a la empresa de Bezos llevar su desarrollo al cliente final, tal y como está haciendo Google conWaymo. No sería extraño viendo la facilidad de la empresa para extender sus tentáculos a una velocidad muy superior a lo habitual en su sector.