Antes los sistemas GPS tenían una precisión de metros, pero pronto esa precisión será de centímetros

Javier Pastor

Hace unos mesesse produjoun desprendimiento de tierra en Leijiashan, en la provincia china de Hunan.Doce días antes sus gobernantes recibieron un mensaje de aviso: el sistema de geoposicionamiento chino, BeiDou, avisó de que había detectado indicios deun posible incidentede ese tipo.

Ese aviso permitió que los daños fueran solo materiales: se salvó la vida de todos sus habitantes gracias a un sistema que escapaz de diferenciar un cambio en el terreno del tamaño de la punta de un lápiz a 21.000 km de altura. Las implicaciones de esa precisión son notables.

GPS está bien, Galileo y BeiDou están aún mejor

Lo contaban recientementeen Technology Review, donde hablaban de que son ya varias las localidades chinas quecuentan con sistemas de monitorizaciónante desastres naturales de este tipo.

Los sistemas de geoposicionamiento global comoBeiDou, GPS o Galileo están recibiendo una serie de mejoras y actualizaciones críticaspara mejorar la precisión, que antes se contaba por metros y que poco a poco se va midiendo en centímetros.

Esa mejora en la precisión permitirá llevar a cabo tareas que hasta la fecha eran mucho más complicadas, y por ejemplosimplificará el despliegue de coches autónomos, que tendrán una noción mucho más precisa de dónde se encuentran (incluido el carril dentro de una carretera) para actuar en consonancia con esos datos precisos.

El sistemaGPSque comenzó a funcionar en 1993 —los 24 satélites que lo conforman se comenzaron a lanzar 15 años antes—tienen una precisión de entre cinco y diez metros, pero dicha red está en plena fase de actualización: el sistema GPS III tardará aún algún tiempo en estar plenamente operativo—se han lanzado cuatro de los 10 satélites que lo conformarán, el resto se acabará de poner en órbita en 2023—, peroreducirá esa precisión a 3 metros.

BeiDou es aún más preciso: sus 44 satélites operan en tres órbitas distintas yofrecen servicios de posicionamientocon una precisión queoscilaentre el metro y medio y los dos metros en general. En zonas específicas de Asia como China, no obstante, los usuariospueden llegar a acercarse a precisiones de un metro.

Lo mismo ocurre conGalileo, el sistema de geoposicionamiento creado por la Unión Europea y que ya está proporcionando servicio —aunque de momentono cuaje demasiado— a través de 22 de sus 26 satélites. La precisión es mejor que la de GPS, y llega a ser de menos de un metro en algunos casos, e incluso en el caso del servicio de alta precisión con señales encriptadas la detección de posiciónpuede tener una precisión de 20 cm.

Hacia precisiones milimétricas y el posicionamiento cuántico

Estos sistemas se ayudan de diversas técnicas paramejorar aún más la precisión y llevarla a niveles de centímetros. Opciones como Real-Time Kinematik (RTK) y el Precise Point Positioning (PPP) están ayudando a ello, y en China están incluso comenzando a combinarlas para que la precisión sea aún mejor en los próximos años.

Se habla ya de cómo estos sistemas podrán en un futuroacercarse a precisiones milimétricas, pero ese parece ser el límite. Los expertos quieren ir más allá y evitar la dependencia de satélites y ahí entrarían en juego alternativas para interiorescomo estao, aún más importante, las propiedades cuánticas de la materia que permitan localizarlas y guiarse sin necesidad de referencias externas.

Eseposicionamiento cuánticopuede ser muy útilsi no disponemos de información de los sistemas GPS (como ocurreen el espacioo bajo el agua), pero tambiénpuede ser un sistema auxiliarpara los coches autónomos por si los sistemas GPS/BeiDou/Galileo no funcionan correctamente.

De hecho uno de estos sistemas en fase muy preliminarya está funcionandoen la Estación Espacial Internacional. Los avances son por tanto destacables, y como hemos vistosus implicaciones prácticas pueden ser realmente notables.