De i-Cockpit y retrovisores digitales, nada: así están luchando los fabricantes de coches contra la escasez de chips

Javier Pastor

Si te gustaba la instrumentación digital de losPeugeot 308, vete olvidando de conseguirla: el grupo Stellantis ha comunicado quedejará de incluir su i-Cockpit en ese modelo, y la razón es clara: la escasez de chips.

Esa escasez es la misma que provoca problemas a la hora de conseguir una PS5 o una RTX 3070 de NVIDIA, pero la industria de la automociónya ha reaccionadocon una medida salomónica:quitando esos extras y volviendo a optar por soluciones “analógicas”.

La venganza de lo analógico

Ocurre desde luego con elPeugeot 308, cuya planta de producción en Sochaux no recibe el chip necesario para el cuadro digital i-Cockpit. Esa opción seguirá estando disponible en otros modelos como el SUV Peugeot 3008, pero para aliviar los problemas de suministro el fabricante francésha decidido volver a salpicaderos mucho más analógicos.

Esa decisión no es la única en este sentido, y fabricantes como el norteamericano RAM —también delgrupo Stellantis—ha dejado de incluir el espejo retrovisor digital de serieen sus camionetasRAM 1500. Solo lo ofrece como extra en su variante más cara.

Los recortes se han contagiado a la pick-upChevrolet Silveradode General Motors, queelimina el módulo de ahorro de combustibleporque el chip que habilitaba esa función también es muy difícil de conseguir actualmente.

Otros componentes como las tabletas que se incluyen en estos vehículos están siendo también eliminados en según qué casos. ElSUV coupé Renault Arkana, que acaba de aparecer en el mercado,no podrá adquirirse con el modelo más grande de tableta anunciada, que tenía una diagonal de 10,2 pulgadas.

Castrarlos navegadores GPS ha sido otra de las opcionesesgrimidas por los fabricantes para luchar contra la escasez de chips. Nissan ha eliminado su navegador como equipamiento de serie en algunos modelos, y se habla de que otros fabricantes seguirán ese ejemplo.

La escasez de chipsestá paralizando a toda la industria automovilística, y aunque en TSMC —que es protagonista clara también en este segmento—indicaronque podrá comenzar a responder a la demanda en junio, muchos analistas creen que la crisis está lejos de haberse resuelto.