Intel Optane dice adiós a los PCs de sobremesa, ahora centrará esta tecnología en servidores

Javier Pastor

La tecnología Optane de Intel nació con un reto complicado: lograr plantear a la revolución de las unidades SSD que cada vez daban más por menos. Intel, por contra, quería dar más por más con estas unidades queciertamente eran veloces, pero cuyo precio era significativamente mayor.

Optane planteaba una pregunta clara hace años:¿resuelve este producto algún problema actual?No pareció hacerlo, y la presencia de estas unidades en portátiles y en PCs de sobremesa ha sido siempre residual. AhoraIntel ha decidido abandonar este producto para PCs, y centrarse específicamente en servidores y, en contados casos, en portátiles.

Otro error más de Intel

La empresa no parece haber acertado demasiado con sus apuestas tecnológicas. La propuesta de Optane era interesante, y su mejora de rendimiento frente a unidades SSD tradicionalesera evidente. La cosa fuemenos llamativa con la llegada de las unidades NVMe y del estándar PCIe 4.0, y actualmente disponemos de unidades quesuperan de largo los 6.000 MBpsen tasas de lectura.

Parece que Intel ha entendido que la apuesta no estaba cuajando, porque en unanuncio recienteindican queabandonan entre otras la línea de productos SSD 905Pdirigida a equipos de sobremesa, que no tendrá sustituta y que por tanto marca el fin de esta alternativa para PCs de sobremesa.

La firma dedicará ahora todos sus esfuerzos a ofrecer soluciones Optanepara servidores—he aquí un ejemplo—, aunquedeja un pequeño resquicio para que también pueda aparecer en portátilesgracias a los módulos Optane Memory H20 (evolución de losH10). Solo son compatibles con chips Intel Core de 11ª generación orientados a portátiles, y serán probablemente productos que veamos en pocos equipos a partir de ahora.

La lista de productos que se abandonanincluye de hecho a más familiasde producto, como indican en Tom’s Hardware:

Esta decisión está probablemente muy alineada con el anuncio reciente de laventa de su negocio de memorias NAND a SK Hynix, y dejan clara la estrategia de una Intel que ha preferidodeshacerse de unas soluciones que no han acabado de cuajar en el mercado. Aunque sus prestaciones eran realmente fantásticas, su precio y la popularidad de las unidades SSD convencionalesha sido un obstáculo demasiado importantepara este tipo de producto.

Vía |Tom’s Hardware