Tras los problemas de Zoom, alternativas como Jitsi, Skype o Facebook Messenger luchan por conectarnos durante el confinamiento

Javier Pastor

Las videoconferencias se han convertido enuno de los servicios más demandados durante el confinamientoprovocado por el coronavirus, y aquíhabía ganadorescomo Microsoft Teams, Houseparty o Zoom que habían conseguido liderar las videollamadas grupales.

Sin embargo Houseparty se ha vistosacudida por rumores de hackeosy Zoom porproblemas de privacidady elfenómeno del ‘zoombombing’. Eso ha provocado que los usuarios estén buscandootras alternativas, y desarrollos comoJitsi, el nuevo Facebook Messenger o incluso Skypetratan de aprovechar su oportunidad. No son los únicos.

El éxito de Zoom le pasa factura

A Zoomle crecen los enanos. La mayoría de protagonistas del mercado de las videoconferencias parecían dormidos en los laureles cuando esta aplicación (junto a Houseparty) comenzó a convertirse en un pequeño fenómeno viral: su incremento en número de usuarios fue espectacular.

En unaentrada en el blog oficialde la empresa sus responsables dejaban clara esa explosión: en diciembre de 2019 tuvieron un máximo de 10 millones de usuarios diarios yen marzo alcanzaron los 200 millones.

El crecimiento en popularidad pronto acabaría teniendo efectos colaterales: el escrutinio de esta aplicación creció, y fueron varios los quedenunciaron problemasen las garantías que el servicio ofrecía en el ámbito de la privacidad.

Eso, unido a temas como el ‘zoombombing’ —desconocidos que se unen a llamadas a las que no han sido invitados— ha hecho que la empresa precisamente indicase en el citado post quedejarían de añadir nuevas característicaspara centrarse en pulir la aplicación y el servicio y arreglar esos problemas de privacidad.

El propio CEO de Zoomadmitía ayerque habían “cometido algunos errores”, pero eso no ha impedido que los problemas hayan causado cierta alerta en redes sociales.

El impacto empieza a notarse, y los gobernantes de Nueva Yorkhan prohibidoZoom como herramienta para clases a través de videollamada.Elon Musk también la prohibió en SpaceXtrasalegarque le generaba “preocupaciones de seguridad y privacidad significativas”.

Alternativas por doquier

La situación por la que han pasado Houseparty o Zoom ha provocado que los usuarios hayan buscado otras opciones en este ámbito. La mayoría ya existían y simplemente han tratado de aprovechar la oportunidad para resurgir con fuerza, pero al hacerloesgrimen argumentos que tratan de diferenciarlasde la competencia.

Skype trata de resurgir

Entre ellas está Skype, que dominaba este segmento hace años pero ha ido cayendo en desuso gradualmente. Microsoft parece haberse enfocado más a Microsoft Teams —su éxito con ella es notable—, pero en Skype han querido reimpulsar tanto su servicio convencional comoSkype Meet Now, con la que podremos crear reuniones a las que los asistentesse pueden unir a través de un simple enlacesin tener cuenta de Microsoft y en las que además no hace falta instalar aplicación alguna.

El problema es queesas reuniones no están disponibles para dispositivos móviles—en ellos sí es necesario la aplicación móvil de Skype—: están pensadas solo para usuarios de navegadores de escritorio como Chrome o Microsoft Edge (no funcionan en Firefox, por ejemplo), algo que limita su utilidad. No cuenta con cifrado de extremo a extremo, aunque sigue siendo una alternativa válida por su madurez y popularidad.

Jitsi Meet y la apuesta por el Open Source

Hemoshablado recientemente en profundidad de Jitsi Meet,un desarrollo Open Sourcede Atlassian —responsables de Jira o Confluence, entre otros productos— que permite acceder a esas videoconferencias uno-a-uno o grupales.

Por defecto el cifrado de extremo a extremo no está tampoco activado, pero los desarrolladores del protocolo WebRTC en el que se basallevan tiempotrabajando en nuevas capas de seguridad. El control que ofrece esta plataforma es especialmente llamativo porque cualquiera puedemontarse su servidor Jitsiparahospedar esta plataforma y no depender de terceros proveedores.Jamies otra alternativa Open Source recomendada incluso por la FSF, por ejemplo.

Facebook Messenger vuelve a mimar a Windows y macOS

La herramienta de mensajería y videoconferencia de Facebook —que coexiste con lasvideollamadas grupales de WhatsApp, por supuesto— lleva tiempo disponible en móviles, perohabía estado algo abandonadaen sus versiones de escritorio para macOS y Windows 10.

Eso ha cambiado recientemente con el lanzamiento de una nueva versión queiguala las prestaciones de los clientes móviles, convirtiéndose así en una opción versátil y multiplataforma para poder mantener esas reuniones en PCs, portátiles o móviles.

Una oportunidad para los servicios “efímeros”

A estas tres opciones se les suman otras muchas que llegan tanto de grandes empresas —Google Hangouts yDuoen un lado, FaceTime de Apple en el otro, por ejemplo— como de otras más pequeñas. Discord, muy presente en el mundo del gaming, esuna opción naturalpara estos usuarios —hay clientes en móviles, por supuesto—, pero hay propuestas que tratan defacilitar esas videoconferencias “efímeras"que se pueden crear sin instalar aplicaciones o sin registrarse en el servicio.

Skype y su Meet Now es una opción en ese escenario, pero hay otras menos conocidas comoWherebyque hemos probado en Xataka y quese comportó —al menos durante nuestras pruebas— mucho mejor: un usuario crea una “sala de reuniones” sin registrarse, comparte el enlace de la sala y el resto de participantes se pueden unir con un navegador de escritorio o uno móvil. Basta conceder permiso al micrófono y cámara cuando se nos pida y listo, podremos acceder a esa videoconferencia grupal de forma sencilla.

Hay también alternativas dirigidas a empresas como la conocidaCisco Webex Meetings, muy reputada aunque con limitación de tiempo (40 minutos máximo) pero aquíherramientas como la citada Teams o su gran rival,Slack, también están ofreciendo tales prestaciones para convertirse en productos aún más versátiles.

Imagen |Unsplash